Estuvimos paseando por algunas partes de la ciudad de Málaga: Elisa, Choni y yo.
Lo que para mí fue un total descubrimiento. Para ponerme en antecedentes sobre contexto e historia, las ocasiones que estuve en Málaga creo que fueron tres: en 2013 pasé un fin de semana como turista sin enterarme de nada, antes, en 2007, canté raggamuffin con el granadino DJ Bolita en una discoteca de las afueras y sobre el 1998 asistí a unas jornadas sobre Renta Básica en una casa okupa.
En esta ocasión pude disfrutar de la ciudad más tranquilamente. Hice fotos a las calles de barrios que me da la impresión de que luchan desde hace tiempo contra el patriarcado y la gentrificación, a la vez que rinden homenaje a Chiquito de la Calzada. La comunidad vecinal y su interacción social era bulliciosa, encontré rastros de trabajos cooperativos y políticos, en contraposición a la parte más turística, donde las intervenciones urbanas de Space Invaders y murales de Shepard Fairey parecían postales turísticas satinadas de la peor calidad conceptual, son artistas que han envejecido bastante mal y repiten sin cesar su iconografía para perpetuar su mercado artístico, sin más interés que su propio nombre o las cualidades formales para su realización (las mismas que hace 20 años).
Espero os gusten las fotillos y muchas gracias a Elisa por acogernos esos días.
Podéis encontrar el resto de las 253 fotografías pinchando en este enlace.
Lo que para mí fue un total descubrimiento. Para ponerme en antecedentes sobre contexto e historia, las ocasiones que estuve en Málaga creo que fueron tres: en 2013 pasé un fin de semana como turista sin enterarme de nada, antes, en 2007, canté raggamuffin con el granadino DJ Bolita en una discoteca de las afueras y sobre el 1998 asistí a unas jornadas sobre Renta Básica en una casa okupa.
En esta ocasión pude disfrutar de la ciudad más tranquilamente. Hice fotos a las calles de barrios que me da la impresión de que luchan desde hace tiempo contra el patriarcado y la gentrificación, a la vez que rinden homenaje a Chiquito de la Calzada. La comunidad vecinal y su interacción social era bulliciosa, encontré rastros de trabajos cooperativos y políticos, en contraposición a la parte más turística, donde las intervenciones urbanas de Space Invaders y murales de Shepard Fairey parecían postales turísticas satinadas de la peor calidad conceptual, son artistas que han envejecido bastante mal y repiten sin cesar su iconografía para perpetuar su mercado artístico, sin más interés que su propio nombre o las cualidades formales para su realización (las mismas que hace 20 años).
Espero os gusten las fotillos y muchas gracias a Elisa por acogernos esos días.
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